Las denuncias de posibles irregularidades se refieren a operaciones de detención deliberada entre 2010 y 2013.
El Ministerio de Defensa británico inició este jueves una investigación independiente de las supuestas actividades ilegales por parte de soldados británicos en Afganistán desde mediados de 2010 hasta mediados de 2013.
Las denuncias sobre posibles irregularidades se refieren a las operaciones de detención deliberada en Afganistán.
«El Ministerio de Defensa ha introducido una serie de medidas en los últimos años al recibir graves denuncias contra nuestras Fuerzas Armadas por acciones irregulares. Muchas de ellas ya están en funcionamiento, incluida la creación de una Unidad de Delitos Graves de Defensa», manifestó al respecto el secretario del ministerio, Ben Wallace.
Este verano, una investigación emitida por la BBC reveló que una unidad del Servicio Aéreo Especial británico (SAS, por sus siglas en inglés) asesinó a decenas de civiles en circunstancias sospechosas durante su operación militar de 6 meses en Afganistán hace más de una década.
De acuerdo con documentos y fuentes anónimas citadas por la cadena, un escuadrón del SAS podría haber matado a 54 personas desarmadas en la provincia de Helmand en 2010 y 2011, en el marco de las misiones denominadas «mata o captura». La función principal de estas operaciones era detener a comandantes talibanes. La BBC también informó que los militares colocaban fusiles AK-47 en el lugar de los hechos para justificar el asesinato de hombres desarmados.