En el marco del cumplimiento de un año del régimen de excepción, el sociólogo Walter Fagoaga, recordó el fin de semana en el que murieron más de 80 personas en 2022, lo que llevó al Gobierno a implementar el régimen, creándose una ruptura importante en la que se marcó un antes y un después en el tema de seguridad en el país, indicó.
“La seguridad ciudadana es el Estado en el cual un ciudadano en una república, un país y un territorio encuentra la libertad, la armonía y se encuentra ausente de temores que puedan hacerle daños físicos, psicológicos y materiales”, expresó.
Para Fagoaga, con el régimen de excepción se quitan derechos y garantías para llevar el orden, se alargan plazos judiciales para detener enemigos en fechas prolongadas y se eliminan la presunción de inocencia.
A pesar de lo anterior, el sociólogo resaltó que poco a poco a medida que se fue recuperando el territorio también la ciudadanía comenzó a denunciar, el ciudadano empezó a perder el temor y empezó a crecer la posibilidad de recuperar el territorio.
De esta manera, señaló que El Salvador pasó de ser el país con tasas más altas de homicidios en América latina, a considerarse hoy en día en uno de los países con la tasa más baja en el territorio latinoamericano.
“Desde la visión de los contractualistas, el Estado sí tiene el derecho al uso de la violencia para llevar al orden a aquellos que interrumpen el contrato social”, manifestó Fagoaga.
