Según Qin Gang, los lazos entre los dos Estados «no representan una amenaza para ningún país y no se verán afectadas por la interferencia o instigación de terceros».
El ministro de Asuntos Exteriores de China, Qin Gang, ha expresado en una entrevista con el periódico árabe Asharq Al-Awsat que Pekín y Moscú defienden el orden mundial y que sus relaciones bilaterales no están sujetas a las amenazas de ningún país.
«A lo largo de los años, las relaciones entre China y Rusia superaron la prueba de la cambiante dinámica internacional. La clave es que ambos países encontraron una vía para que los principales países construyan una confianza estratégica y una buena vecindad, una vía de no alineación, de no confrontación y no ataque a terceros», sostiene, agregando que los lazos entre los dos Estados «no representan una amenaza para ningún país y no se verán afectadas por la interferencia o instigación de terceros».
El alto diplomático destaca que «China y Rusia seguirán avanzando en su asociación estratégica integral de coordinación para la nueva era«.
«Los dos países salvaguardarán el sistema internacional centrado en la ONU, el orden internacional sustentado en el derecho internacional y las normas básicas de las relaciones internacionales basadas en los propósitos y principios de la Carta de la ONU, defenderán el verdadero multilateralismo, promoverán la multipolaridad global y una mayor democracia en las relaciones internacionales, y contribuirán en su justa medida al progreso de la humanidad«, detalla.
Asimismo, el jefe de la diplomacia china asegura que Pekín «seguirá colaborando con la comunidad internacional y desempeñando un papel constructivo para la resolución política de la crisis ucraniana«. «Al mismo tiempo, nos oponemos firmemente a los actos hegemónicos e intimidatorios de EE.UU. y salvaguardaremos resueltamente nuestros derechos e intereses legítimos», subraya.