El consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, ha pedido a Israel que distinga entre objetivos relacionados con Hamás y otros que puedan acabar con la vida de civiles en su ofensiva en Gaza.
«Israel tiene la intención de hacer esta distinción de forma permanente y clara», ha dicho Sullivan en una comparecencia de prensa en Jerusalén. Según el alto cargo estadounidense, esa distinción no es «sólo una cuestión moral ya que las vidas de civiles son sagradas y deben ser protegidas, sino también una cuestión estratégica para Israel de cara al futuro».
Sullivan también ha pedido a Israel que garantice que la ayuda humanitaria llega en cantidad suficiente a la población palestina, la mayor parte de la cual está sufriendo todo tipo de carencias en la zona sur de la Franja.
En relación al futuro del conflicto, Sullivan ha admitido que la lucha contra Hamás aún va a durar meses y va a tener distintas fases. En ese sentido, apunta a que ha hablado con el gobierno de Netanyahu para iniciar un tiempo de menor intensidad en los ataques y para analizar qué tipo de munición utiliza su ejército.
Según Estados Unidos, Israel le ha dado garantías de que no tiene intención de ocupar la Franja de Gaza después de la guerra, por lo que se iniciará un período de transición para que sean los palestinos quienes mantengan el control de ese territorio.
Por último, Sullivan se ha referido a los recientes ataques con drones lanzados por los hutíes de Yemen, aliados de Hamás, hacia distintos barcos comerciales de países occidentales que están en el Mar Rojo. El consejero estadounidense considera que Irán es realmente el responsable de esos ataques.
Siguen los ataques
Entre tanto, apenas ha cambiado el panorama en cuanto a los ataques de Israel en las últimas horas. La ofensiva del ejército hebreo ha seguido tanto en el norte como en el sur de la Franja, con especial impacto en la ciudad de Rafah, situada muy cerca de la frontera con Egipto y en la que ahora mismo se refugia casi la mitad de toda la población de Gaza.
Según las autoridades gazatíes, al menos 63 personas han muerto ya este viernes por los ataques de Israel, entre ellos varios niños que han sido víctimas de ataques aéreos, y también con tanques y artillería. Uno de esos ataques ha impactado en un mercado y en varias viviendas colindantes, y otro proyectil se ha lanzado contra una escuela. Tanto Israel como Sullivan en su comparecencia de esta mañana siguen argumentando que Hamás utiliza escuelas y hospitales para esconderse.