El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se refirió este jueves a los recientes ataques entrecruzados por Irán y Pakistán, asegurando que la «aversión regional» hacia el país persa es la principal causa de este conflicto.
«Como pueden ver, Irán no es particularmente querido en la región. Hacia dónde va eso, es algo en lo que estamos trabajando ahora», respondió el mandatario estadounidense a un periodista que le preguntó al respecto. «No sé para dónde va eso», añadió.
El martes, Teherán atacó dos instalaciones estratégicas del grupo terrorista Jaish al Adl (Ejército del Islam, traducido del árabe) localizadas en Pakistán. Dos días después, Islamabad realizó ataques militares de precisión, altamente coordinados, contra «escondites terroristas» en la provincia iraní de Sistán y Baluchistán.
Biden, quien ha mantenido una actitud de acercamiento con Irán en los últimos meses, calificó los ataques de «preocupantes» y aseguró que su Gobierno está trabajando para «disminuir las tensiones» en la región.
«Estamos trabajando con nuestros aliados y socios para tratar de reducir las tensiones y evitar que la situación empeore», dijo el presidente estadounidense.
El conflicto entre Irán y Pakistán se remonta a décadas atrás, y se ha intensificado en los últimos años debido al aumento de la actividad de grupos terroristas en la región.
En concreto, Jaish al Adl es un grupo terrorista que opera en la frontera entre Irán y Pakistán, y que ha llevado a cabo numerosos ataques contra objetivos civiles y militares en ambos países.
Los ataques de esta semana han vuelto a poner de manifiesto la fragilidad de la situación en la región, y han generado preocupación en la comunidad internacional.