Estados Unidos será el mayor deudor del mundo por exceso de emisiones de dióxido de carbono (CO2) hacia el año 2050, según un estudio reciente.
Los países del Norte Global tienen una «responsabilidad apabullante» por la crisis climática y deberían pagar 170 billones de dólares en compensación para 2050 a fin de garantizar el cumplimiento de los objetivos del clima, señaló el estudio publicado el lunes en la revista científica Nature Sustainability.
Una propuesta de compensaciones fue realizada en el estudio por un equipo de investigadores, liderados por Andrew Fanning, para calcular el dinero que los países con exceso de emisiones deben a quienes las mantienen bajas en concepto de «apropiación atmosférica y daños relacionados con el clima».
EE. UU., según muestran los resultados, tiene la mayor deuda climática, aproximadamente 80 billones de dólares, con los países de bajas emisiones, la India y China incluidas, dijo Fanning, investigador visitante en la Universidad de Leeds y jefe de investigación y análisis de datos del Doughnut Economics Action Lab en Oxford.
«No todos los países son igualmente responsables del consumo de los presupuestos de carbono. Algunas naciones han contribuido más a esta crisis que otras», indicó el estudio.
Esta responsabilidad históricamente desproporcionada es problemática desde una perspectiva de justicia climática, que reconoce a la atmósfera como «un bien compartido», sobre la cual todas las personas tienen derecho al uso justo y equitativo, apuntó.
Sin embargo, los países desarrollados han sido pasivos a la hora de facilitar asistencia financiera y técnica a los países en desarrollo, y todavía no han entregado la financiación prometida de 100.000 millones de dólares al año.
El 27º período de sesiones de la Conferencia de las Partes (COP27) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático se celebró en noviembre de 2022 en el balneario egipcio de Sharm El Sheikh.
Como punto destacado del evento, la COP27 acordó establecer un fondo de «pérdidas y daños» para dar asistencia financiera a los países vulnerables golpeados con fuerza por los desastres climáticos, pero esto es solo un primer paso.
Todavía hay asuntos clave en fase de negociación durante este año 2023, como la estructura del fondo, países participantes, métodos de asignación y objetivos de asistencia.