El Tribunal Quinto de Sentencia instaló la vista pública contra Ana Granados y Rosa Zepeda, acusadas de extorsión. El caso es uno más de acusaciones y detenciones arbitrarias, según los defensores y familiares, quienes por tal razón acudieron a diversas instancias a denunciar el proceder de los investigadores y agentes.
Recientemente, fueron notificados que los policías que capturaron a las dos mujeres serán investigados por fraude procesal, es decir, por falsificar pruebas.
Desde la acusación y durante el proceso contra las jóvenes, la defensa ha advertido una serie de irregularidades, que a su juicio, comprueban que el caso fue montado con astucia y premeditación.
Nicolás Vázquez, su abogado defensor, señala que la acusación pudo derivarse de un conflicto que tuvo una de las ahora detenidas con un familiar de los investigadores.
De acuerdo a los familiares, tanto la Policía como Fiscalía cometieron irregularidades en los procesos. Dicen que los agentes de la corporación policial llegaron hasta el lugar de residencia de Zepeda, llevándosela desde horas de la mañana y bajo engaño. Sin embargo, en las actas de detención y remisión las horas no concuerdan. Piden que el caso se esclarezca y dejen en libertada a ambas jóvenes.
La vista pública fue suspendida en tres ocasiones. En la última, debido a que Fiscalía no presentó documentos que el tribunal ordenó a petición de la defensa.
Durante el proceso, las imputadas han estado detenidas en el Centro Penal de Ilopango y en la Granja Penitenciaria de Izalco. El proceso es monitoreado por personal de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, quienes advierten indicios de abuso de autoridad.