Aunque las autoridades estadounidenses son conscientes de que el objetivo de Israel de destruir Hamás podría provocar la muerte de civiles, creen que «esto es bastante aceptable y no privará a Tel Aviv del apoyo de Washington», asegura el organismo.
A pesar del declarado deseo de paz en Oriente Medio, la Casa Blanca pretende obstaculizar las iniciativas de alto el fuego en la Franja de Gaza, aunque es consciente de que las operaciones israelíes podrían provocar la muerte de un gran número de civiles, afirma el Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR, por sus siglas en ruso).
De acuerdo con un comunicado emitido este lunes por el servicio de prensa del organismo, en medio de la tragedia que sufre la Franja de Gaza, en la que ya han muerto miles de civiles palestinos por las acciones de Israel, las autoridades estadounidenses «han vuelto a recurrir a su herramienta favorita»: la hipocresía.
Se señala que aunque Washington manifiesta públicamente su supuesta preocupación por las muertes de palestinos a causa de los ataques israelíes y expresa su deseo de establecer la paz lo antes posible, «la verdad es que, detrás de las ‘puertas cerradas’ con los dirigentes israelíes, los estadounidenses están manteniendo conversaciones muy diferentes».
Así, según los datos de inteligencia, la Casa Blanca está instando a Tel Aviv a acelerar su ofensiva en el enclave palestino para evitar que la prolongación del conflicto tenga un impacto negativo en la campaña electoral del presidente Joe Biden de cara a las elecciones de 2024. Además, aunque el Gobierno de EE.UU. es consciente de que el objetivo de Israel de destruir el movimiento Hamás podría provocar la muerte de un gran número de civiles, cree que «esto es bastante aceptable y no privará a Tel Aviv del apoyo de Washington».
«Para promover su hipócrita postura, el equipo de Biden ha conseguido el apoyo de los líderes del Reino Unido y Alemania. Juntos, pretenden obstaculizar las iniciativas que contemplan un alto el fuego en Gaza. Es evidente que así funciona el orden basado en normas que Washington ofrece al resto del mundo», subrayaron desde el SVR.