La fiscalía paraguaya está investigando una supuesta trama de protección a Sebastián Marset, el narco uruguayo prófugo, por parte de altos funcionarios de las fuerzas policiales y políticas de Paraguay. Se ha puesto especial atención en los vínculos entre la oficina de Interpol Paraguay y un alto funcionario del gobierno de Santiago Peña.
El escándalo estalló cuando se descubrió que desde la oficina de Interpol Paraguay se levantaron las alertas rojas que pedían la captura internacional de la esposa de Marset, Gianina García Troche, y el administrador de sus negocios en Paraguay, José Fernando Darío Estigarribia Cristaldo. Estas acciones permitieron que Marset negociara su entrega en Uruguay por delitos menores, según declaraciones del propio narco en una entrevista televisiva.
Las fiscales a cargo de la investigación han incautado los celulares de 17 agentes de Interpol y se encuentran en contacto con la sede central de Interpol en Lyon, Francia, para obtener más información sobre quiénes estuvieron involucrados en el levantamiento de las órdenes de captura.
Hasta el momento, el único funcionario removido de su cargo es el jefe de gabinete de la oficina de Interpol, Rodolfo Oliver Fernández Almada. Sin embargo, altas fuentes judiciales señalan al jefe de la oficina de Interpol Paraguay, comisario principal Juan Alejandrino Pereira Aguilar, como uno de los principales implicados. Pereira Aguilar se encuentra actualmente en Austria participando en la Asamblea General de Interpol.
Sebastián Marset ha sido objeto de búsqueda internacional desde su arresto en Dubai en 2021. Logró escapar utilizando un pasaporte uruguayo y desde entonces ha estado prófugo, reapareciendo en Bolivia este año. A pesar de los esfuerzos de las fuerzas de seguridad de Bolivia y Paraguay, su paradero actual es desconocido.
