Este lunes, el economista José Luis Magaña realizó un análisis sobre la diversidad generacional, refiriéndose específicamente a la generación de los millennials y la generación Z en El Salvador, etiquetas las cuales recalcó son bastante generales.
Explicó que la generación de los millennials es la que nació entre 1981 y mediados de los años 90´s quienes vivieron la transición entre la época analógica y digital. Por su parte de la generación Z que sería de finales de los 90´s y principios de la primera década de los 2000, quienes crecieron con el internet.
En este sentido, Magaña indicó que son los millennials quienes están relevando en los mercados de trabajo y están asumiendo un mayor protagonismo, y la generación Z está iniciando a insertarse en los mercados de trabajo.
“Como funciona el sistema de pensiones, muchas de las generaciones que estamos viendo que se van a jubilar depende de las condiciones del mercado actual, por lo tanto, las condiciones están en ese proceso de consolidación de la generación millenial y la introducción de la Z”, manifestó el economista.
Dio a conocer, que según datos de la encuesta de hogares de propósitos múltiples generada por la Oficina de Estadísticas y Censos del Banco Central de Reserva, 2021, revela que son cerca de 2.3 millones de personas en El Salvador son mayores de 18 años, un poco menos de la mitad de la población del país. Agregó que alrededor de 1.4 millones están haciendo un trabajo remunerado, 303 mil personas están realizando sus estudios y 458 mil personas están realizando trabajos domésticos no remunerado.
“Estamos hablando que 1 de cada 5 personas de estas generaciones no están trabajando ni estudiando, pero porque están realizando trabajos domésticos y de cuidados no remunerados y para que veamos como está la desigualdad, 1 de cada 3 mujeres millennials no están en trabajos remunerados ni estudiando, justamente por la sobrecarga de trabajos no remunerados”, expresó.
Asimismo, manifestó que a pesar que tanto los millennials como la Z es una generación joven, los datos señalan que la exclusión que existe en los mercados de trabajo para las mujeres es algo que aún se mantiene aún en las nuevas generaciones.
Finalmente, señaló que solo el 22% de las personas de estas generaciones tienen un empleo con el cual pueden cotizar al sistema de pensiones, lo que revela que las condiciones no son las más favorables.
