El primer ministro británico, Rishi Sunak, afirmó este lunes que la investigación que ha llevado a cabo el Reino Unido apunta a que la explosión que mató a cerca de medio millar de personas en el hospital Al Ahli de Gaza fue provocada por un misil disparado desde la franja.
«En base al conocimiento profundo y el análisis de nuestros servicios de inteligencia y expertos en armamento, el Gobierno británico juzga que la explosión fue probablemente causada por un misil, o parte de uno, que fue lanzado desde dentro de Gaza hacia Israel», dijo Sunak en la Cámara de los Comunes.
La «información errónea» divulgada sobre ese incidente, agregó el jefe de Gobierno, ha tenido un «efecto negativo en la región», ha minado «esfuerzos diplomáticos vitales de Estados Unidos» y ha creado «tensiones» en el Reino Unido.
La visita del presidente de EEUU, Joe Biden, a Israel tuvo lugar pocas horas después del ataque. Durante el vuelo estuvo analizado las imágenes y poco después de aterrizar y tras hablar con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, concluyó que Israel no estaba detrás de lo ocurrido: «Por lo que hemos visto, parece que lo han hecho los otros».
El ataque, que tuvo lugar el 17 de octubre, fue ampliamente condenado por la comunidad internacional. Hamás, el grupo islamista que controla Gaza, responsabilizó a Israel del ataque, mientras que el ejército israelí negó cualquier responsabilidad.
El informe británico se basa en el análisis de imágenes de satélite, vídeos y testimonios de testigos presenciales. Según el informe, el misil que causó la explosión se lanzó desde un área controlada por Hamás en la ciudad de Gaza.
El documento también señala que el misil no impactó directamente en el hospital, sino que explotó en un edificio cercano, causando daños estructurales que provocaron el colapso del hospital.
El detalle del informe británico es el último de una serie de investigaciones que han llegado a la misma conclusión. El 20 de octubre, el Pentágono publicó un informe preliminar que señalaba que el ataque fue probablemente causado por un misil lanzado desde Gaza.
El documento del Pentágono fue recibido con críticas por parte de Hamás, que lo calificó de «mentira». El grupo terrorista insistió en que Israel fue el responsable del ataque.
La conclusión del informe británico es un duro golpe para Hamás, que ha tratado de utilizar el ataque para culpar a Israel de la muerte de civiles palestinos.