La mayoría de los médicos de Cruz Roja que trabajan en el norte de la Franja de Gaza han decidido permanecer en sus puestos a pesar del ultimátum dado por Israel para que se desaloje la zona en 24 horas.
La organización ha explicado que los hospitales apenas pueden funcionar, pero aun así los médicos no quieren abandonar a sus pacientes.
«Las organizaciones humanitarias no seremos capaces de asistir a un desplazamiento masivo en Gaza bajo un asedio militar», ha rezado un comunicado publicado por Cruz Roja.
La Organización Mundial de la Salud ha avisado de que todo el sistema sanitario de Gaza está al borde del colapso según pasan las horas y los generadores agotan el combustible que aún les quedaba.
La agencia de la ONU para Palestina ha trasladado a su personal internacional hacia el sur de la Franja de Gaza, pero los miles de trabajadores gazatíes y sus familias permanecen en sus barrios.
La OMS ha confirmado que las autoridades sanitarias palestinas les han informado de que es imposible evacuar a los pacientes más vulnerables de los hospitales del norte de Gaza.
El ultimátum de Israel ha generado una gran incertidumbre y preocupación entre la población del norte de la Franja de Gaza.
Muchos civiles no saben dónde ir si se tienen que desplazar, y otros temen por su seguridad si se quedan en sus casas.