Este martes en el espacio de Plataforma, el sociólogo, Walter Fagoaga, analizó los dilemas éticos salvadoreños desde la visión de San Romero de América, en la conmemoración de su asesinato el 24 de marzo de 1980, señalando que se puede pensar San Oscar Romero como el principal fundador de la idea de derechos humanos en El Salvador, a través de sus homilías con mensajes claros que al escucharlos en la actualidad nos permite conocer si la sociedad de nuestro país ha evolucionado.

“San Romero es asesinado por su voz y visión del mundo, con una postura clara que el conflicto no se resolvía con balas, sino con diálogo y haciendo justicia y no generando injusticias… San Romero le pertenece al pueblo salvadoreño y feligresía católica, su mensaje de paz y conciliación, donde las personas deben tener en cuenta el valor de la vida como sustento fundamental, la dignificación de las personas, ante esto, da un mandato de cesar la represión” explicó Fagoaga.

Fagoaga, destacó que El Salvador sigue siendo un país que prioriza el crecimiento económico sobre la equidad y que solo beneficia a pocas personas, una razón para que la migración continúe sin importar las dificultades migratorias generadas por la administración estadounidense, en este sentido, Monseñor Oscar Arnulfo Romero tenía una visión sobre la realidad que denunciaba mientras vivía.

“Monseñor Romero denunciaba la explotación de trabajadores, esta visión contrasta con el modelo que prioriza inversión extranjera con el deterioro de derechos laborales… Romero miraba la pobreza y falta de oportunidades, en su visión el problema no era la migración, sino las condiciones de vida y que sigue en la actualidad” señaló Walter Fagoaga.

Para el sociólogo, en la actualidad el país tiene serios problemas sobre dilemas éticos que generan conflictos de valores, razón por la que no se debe instrumentalizar este tipo de dilemas para justificar alguna acción.

“Un ejemplo es la seguridad y derechos humanos, en régimen de excepción, una medida de seguridad que ha encarcelado algunos inocentes” señaló el sociólogo.