El ministro de Ganadería de Uruguay, Fernando Mattos, dijo hoy que las recientes lluvias aliviaron la situación de sequía en algunas de las zonas más afectadas y que espera que el déficit hídrico se revierta en la próxima primavera austral.
«Zonas muy afectadas como los departamentos de San José (sur), Colonia (oeste) y Canelones (sur) tuvieron lluvias que aliviaron bastante la situación», indicó Mattos en rueda de prensa tras una actividad oficial en Montevideo.
«Se nota en el ánimo de los productores que están más conformes, más contentos», añadió el titular del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP).
No obstante, «falta mucho para reponer los acuíferos, los reservorios en superficie», puntualizó.
Señaló que «ojalá se confirmen los pronósticos que indican que en primavera tendremos una reversión (de la sequía) e importantes precipitaciones».
«Estamos en emergencia agropecuaria hasta el 24 de septiembre y pocos días antes evaluaremos la situación. Ojalá sea el final de un proceso bastante largo que ha ocasionado muchas pérdidas para el sector productivo y la economía en general», sostuvo Mattos.
Las exportaciones agroindustriales concentran más del 80 por ciento de las ventas externas del país.
El déficit hídrico también impactó en las reservas de agua dulce para la potabilización, que alcanzaron un mínimo histórico, por lo que la empresa estatal OSE debió elevar los niveles de sodio y cloruro del líquido para mantener su suministro.
A raíz de las lluvias registradas en los últimos días el embalse de Paso Severino, la principal reserva de agua dulce para la potabilización, aumentó hoy por noveno día consecutivo y pasó de 2.581.204 metros cúbicos a poco más de tres millones, en un total de 70 millones de capacidades, informó esta noche la Presidencia uruguaya.
La sequía que afronta Uruguay desde hace tres años «no tiene precedentes» y es la peor desde principios del siglo XX, cuando se inició tal registro en el país sudamericano, informó en mayo el Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet).