El presidente Joe Biden recibirá este viernes en la residencia de descanso de los mandatarios al primer ministro japonés, Fumio Kishida, y a su par surcoreano, Yoon Suk Yeol.
Según anticipó el secretario de Estado Antony Blinken, la reunión marcará “una nueva área en la cooperación trilateral entre nuestros países”. Durante una conferencia de prensa el martes, el alto funcionario del gobierno de Biden apuntó que Japón y Corea del Sur son aliados fundamentales, no solo en la región, sino en todo el mundo.
La cumbre a tres bandas tendrá una declaración conjunta que establecerá una percepción e intereses compartidos en materia de seguridad, con referencias no solo a China, sino también a la República Popular Democrática de Corea y el conflicto Rusia-Ucrania.
De acuerdo con adelantos de la prensa, además figuran en el orden del día un acuerdo sobre consultas mutuas en caso de crisis y la convocatoria de cumbres trilaterales anuales.
La relación Estados Unidos-Japón-Corea del Sur es fuerte, pues son socios tecnológicamente avanzados, poseen capacidades defensivas de importancia y en conjunto albergan alrededor de un centenar de bases militares permanentes con la presencia de unos 80 mil soldados estadounidenses.
Para algunos observadores el contexto actual es el de una China en ascenso económico, financiero, comercial y militar y un Estados Unidos que trata de mantener su hegemonía y teme seguir perdiendo posiciones.