Yohaldi, un joven albañil de 24 años que estuvo detenido más de dos años sin haber cometido delito alguno, falleció este 17 de febrero debido a complicaciones derivadas de una insuficiencia renal. Su caso ha generado indignación entre organizaciones de derechos humanos, quienes habían denunciado con antelación su crítico estado de salud mientras permanecía bajo custodia del Estado salvadoreño.
De acuerdo con la denuncia de la organización Socorro Jurídico Humanitario, Yohaldi fue detenido injustamente durante el régimen de excepción y permaneció encarcelado desde los 22 años, pese a no tener vínculos con pandillas ni antecedentes criminales. Tras más de dos años de reclusión, el 13 de septiembre de 2024 fue entregado a sus familiares bajo medidas alternas a la detención, pero su estado de salud era crítico.
«Cuando se lo llevaron era un joven completamente sano, con sueños e ilusiones. Regresó a casa prácticamente moribundo, y el Estado nunca se hizo responsable del daño que le provocaron», declaró la organización. Yohaldi no recibió apoyo estatal para realizarse las diálisis necesarias para tratar la insuficiencia renal que desarrolló durante su tiempo en detención.
El caso ha puesto nuevamente en el centro del debate las condiciones en los centros penitenciarios durante el régimen de excepción implementado por el gobierno de Nayib Bukele, así como las consecuencias que ha tenido sobre personas inocentes.
Organizaciones defensoras de derechos humanos recalcan que su lucha no es en defensa de pandilleros, sino en favor de personas injustamente afectadas por políticas que califican de represivas. «La popularidad del gobierno de Nayib Bukele se paga con la sangre de inocentes», concluyó Socorro Jurídico Humanitario.