El incendio forestal que se inició este jueves en Montitxelvo, en la provincia de Valencia, sigue activo y ha arrasado ya unas 2.000 hectáreas de terreno. El fuego, que se ha visto agravado por el fuerte viento de poniente, ha obligado a desalojar a unas 800 personas de las poblaciones de Terrateig, Castellonet de la Conquesta, Ador y Villalonga.

El incendio se inició a las 2:15 de la tarde en el barranco de la Font, en Montixelvo. Las llamas se han propagado rápidamente por la zona, debido al viento y a la falta de humedad. Los equipos de extinción, apoyados por la Unidad Militar de Emergencias (UME), están trabajando para controlar el fuego, pero la tarea es complicada.

El incendio ha provocado daños en viviendas y en el entorno natural. En la zona se han registrado caídas de árboles y cortes de tráfico.

El incendio es un golpe de realidad para la Comunidad Valenciana, que sufre una nueva ola de calor y de incendios forestales. El cambio climático está haciendo que los incendios sean cada vez más frecuentes y más intensos.

Medidas preventivas

Ante la situación, las autoridades han recomendado a la población que evite acercarse a las zonas forestales y que siga las indicaciones de los bomberos.

También se han tomado medidas preventivas en algunos municipios, como el cierre de parques y la suspensión de actividades al aire libre.