El Juzgado Cuarto de Instrucción de San Salvador reabrió el proceso judicial en contra del capitán Álvaro Rafael Saravia acusado de participar en el asesinato de monseñor Óscar Arnulfo Romero.
La instancia judicial dejó sin efecto el sobreseimiento definitivo que se había decretado, el 31 de marzo de 1993, a favor de Saravia. En aquel año, la Asamblea Legislativa aprobó la Ley de Amnistía, que dejaba sin responsabilidad civil y penal a quienes violaron los derechos humanos durante el conflicto.
Según informó el área de prensa del Centro Judicial Isidro Menéndez, el juez Rigoberto Chicas consideró de carácter obligatorio cumplir con la Sentencia de la Sala de lo Constitucional que invalidó la Ley de Amnistía en 2016 con el objetivo de garantizar los derechos de las víctimas de los crímenes de guerra y de lesa humanidad.
«Es procedente oír la opinión de la Fiscalía por considerar que el proceso fue iniciado de oficio sobre averiguar el asesinato de Monseñor Romero y, posteriormente, atribuido al capitán Álvaro Rafael Saravia y otros sujetos que según resolución judicial no han sido individualizados», señala la resolución.
El proceso judicial, que era llevado por el Juzgado Cuarto de lo Penal, inició en 1980 y el único imputado fue Saravia, a quien se le encontró una libreta con apuntes relacionadas al asesinato del religioso.
Según señaló el informe de la Comisión de la Verdad, uno de los autores intelectuales del homicidio de Romero fue el mayor Roberto d´Aubuisson, fundador de ARENA. D´Aubisson falleció en 1992 a causa de un cáncer de garganta.
El arzobispo fue asesinado el 24 de marzo de 1980 mientras oficiaba una misa en la capilla del Hospital de la Divina Providencia, ubicado en la colonia Miramonte, en San Salvador.
Monseñor Romero fue beatificado en el 2015 luego que el Vaticano lo reconociera como mártir de la iglesia. Las autoridades católicas salvadoreñas esperan que este año sea canonizado Romero, en el marco del centenario de su nacimiento.
