Los disturbios frente la sede del PSOE en Madrid acaban con seis detenidos y 39 heridos, 29 de ellos policías.
Una protesta convocada por grupos ultra contra la ley de amnistía terminó este martes con seis detenidos y 39 heridos, 29 de ellos policías, en las inmediaciones de la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid.
La concentración, que reunió a unas 7.000 personas, comenzó de forma pacífica, pero se tornó violenta alrededor de las nueve de la noche, cuando un grupo de manifestantes comenzó a lanzar huevos y botellas de cristal a la prensa y a la Policía Nacional.
Los agentes respondieron cargando contra los manifestantes con porras y gases lacrimógenos, lo que provocó que la situación se agravara. Los manifestantes respondieron lanzando más objetos y quemando contenedores.
La tensión se prolongó durante varias horas, hasta que los antidisturbios lograron dispersar la concentración.
Entre los heridos hay dos agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) que presentaban contusiones por golpes, según las fuentes. Los sanitarios del Samur han apreciado brechas, irritación de ojos y contusiones a los heridos.
Estos seis arrestos se suman a los tres que se practicaran este lunes en el mismo lugar después de que un grupo ultra de unas 200 personas arrojara botellas y objetos contra los agentes de la Policía y cortara las bridas del vallado de seguridad de la zona.
Las fuentes no han concretado los delitos que de momento se les imputan a los detenidos, que han protagonizado incidentes en una concentración no comunicada a la Delegación del Gobierno y que se ha saldado con 12 heridos, dos de ellos policías.
La marcha de los ultras
Debido al enorme blindaje dispuesto por los efectivos de la UIP alrededor de la calle Ferraz, un grupo de manifestantes ha dirigido sus protestas contra los pactos el PSOE y los independentistas catalanes hacia la Gran Vía de Madrid y el Congreso de los Diputados.
Estos se habían citado a las siete de la noche en el Parque del Oeste desplazándose posteriormente a Ferraz. Poco antes de las ocho de la noche, se han vuelto a trasladar hacia la Gran Vía para dirigirse al Congreso de los Diputados y se han congregado en Neptuno después de que la Policía blindase los alrededores de la Cámara Baja.
Posteriormente, el mismo grupo ha regresado por Gran Vía para volver a unirse al grueso de la protesta en Ferraz. Ha sido a partir de las 11:30 de la noche cuando los antidisturbios han podido controlar a los sectores más revolucionarios y dispersar la concentración que ha dejado la calle Ferraz y sus aledañas deterioradas.
Reacciones políticas
Los partidos políticos han condenado los disturbios y han llamado a la calma.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expresado su «total rechazo» a la violencia y ha llamado a «todos los demócratas a defender la convivencia».
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha condenado «enérgicamente» los disturbios y ha llamado a «respeto a las instituciones y a la democracia».
La portavoz de Vox en el Congreso, Macarena Olona, ha defendido el derecho a la manifestación y ha acusado al Gobierno de «provocar» a los manifestantes.
La líder de Podemos, Ione Belarra, ha condenado «los violentos que han querido boicotear la democracia».