Un ataque aéreo israelí ha dejado al menos 18 muertos y decenas de heridos en la iglesia ortodoxa de San Porfirio en Gaza, donde se refugiaban casi medio millar de personas, incluyendo mujeres y niños.

El Ejército de Israel ha reconocido que sus aviones de combate atacaron un centro de comando y control de Hamás cerca de la iglesia, pero ha negado que el templo fuera el objetivo del ataque.

El Patriarcado Griego Ortodoxo de Jerusalén ha condenado el bombardeo, asegurando que «constituye un crimen de guerra».

El conflicto entre Israel y Hamás ha dejado hasta el momento al menos 4.137 muertos y 13.162 heridos en la Franja de Gaza, la mayoría de ellos mujeres y niños.

El ataque a la iglesia de San Porfirio es el último de una serie de ataques israelíes contra objetivos civiles en Gaza.

El pasado jueves, un ataque aéreo israelí mató a al menos 21 civiles, incluidos niños, en la ciudad de Jan Yunis.

Los ataques israelíes han dejado un panorama de destrucción en Gaza.

La mayoría de las infraestructuras de la Franja han sido dañadas o destruidas, y miles de personas han sido desplazadas de sus hogares.

El conflicto entre Israel y Hamás ha provocado la peor crisis humanitaria en Gaza desde la guerra de 2014.