Un potente ciclón extratropical ha azotado parte del sur de Brasil durante la noche, dejando al menos a 30 personas fallecidas en los estados de Rio Grande do Sul y Santa Catarina.

Más de 50 ciudades del sur de Brasil se vieron afectadas por el ciclón, cuyas lluvias torrenciales y fuertes vientos provocaron la crecida de los ríos e inundaciones en varias zonas. Cientos de residentes de la zona se vieron obligados a abandonar sus hogares. Los equipos de Defensa Civil han dirigido las operaciones de rescate y asistencia con el apoyo de bomberos y recursos militares. En el estado de Rio Grande do Sul, un hombre perdió la vida cuando su camioneta fue arrastrada por las aguas rápidas, otros dos murieron como consecuencia de la caída de rayos, en dos incidentes separados. En otro caso, dos hombres murieron atrapados en su automóvil cuando intentaban cruzar un arroyo desbordado. En el estado de Santa Catarina, un hombre murió cuando un árbol cayó sobre el coche que conducía, en medio de vientos de más de 100 km por hora.

El 5 de septiembre, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva prometió, en su programa semanal en directo, todo el apoyo del gobierno a las zonas afectadas, que ya han sufrido otros fenómenos meteorológicos graves en los últimos meses. Según Lula, esto es resultado del cambio climático.

«Lo que está ocurriendo ahora es una advertencia para que la humanidad se dé cuenta de que esta cuestión del clima no es un asunto menor. No es un asunto de profesores universitarios, no es un asunto de ambientalistas. Es un asunto de toda la humanidad. El planeta está sufriendo las consecuencias de la irresponsabilidad humana», dijo el presidente brasileño.

En el evento reciente más letal, las tormentas dejaron a 16 personas muertas en el estado de Rio Grande do Sul en junio. Este último ciclón se originó en un sistema de bajas presiones que ya había causado fuertes lluvias y ganó fuerza a medida que avanzaba hacia el océano. Según los meteorólogos, se espera que el ciclón se aleje de Brasil, pero las zonas de mayor altitud pueden seguir sufriendo rachas de viento peligrosas hasta el día 5.