Israel aseguró este martes haber recuperado el control de la zona fronteriza con la Franja de Gaza y haber logrado cesar la infiltración de milicianos de Hamás en su territorio. También confirmó haber recuperado alrededor de 1.500 cuerpos de integrantes de la milicia islamista.

«Hemos restaurado prácticamente el control completo en la valla fronteriza con Gaza, estamos restaurando y organizando el perímetro», indicó a medios internacionales Richard Hecht, portavoz del Ejército, al precisar que aunque las infiltraciones de milicianos aún pueden ocurrir, no se han reportado incidentes de este tipo en las últimas horas.

Durante la noche se registraron dos tiroteos entre milicianos y fuerzas israelíes en el área aledaña a la frontera, «pero más allá de eso, la zona ha sido asegurada», ha recalcado Hetch, precisando que todas las comunidades israelíes cercanas al enclave palestino han sido evacuadas.

Además, ha informado de que las fuerzas israelíes están «construyendo una infraestructura para futuras operaciones» en esa zona, y que el Ejército está «enfocado en la ofensiva en la Franja de Gaza, en los ataques aéreos» contra el enclave palestino por aire, tierra y mar.

Mueren dos altos cargos de Hamás

En uno de esos ataques, Israel ha matado a dos altos cargos de Hamás, ha confirmado este martes la oficina de prensa de las Fuerzas Armadas israelíes a través de un comunicado.

Se trata de Yoad Abu Shmala, ministro de Economía de la Franja de Gaza y miembro de Hamás, así como Zacaría Abu Maamar, un alto cargo de la misma organización y jefe del departamento de relaciones internas, señala el comunicado.

Ambos fallecieron durante bombardeos aéreos efectuados la noche de este lunes, indica la nota.

Bombardeos sobre más de un millar de objetivos de Hamás

Este martes, decenas de aviones de combate de Israel han continuado los bombardeos sobre objetivos de Hamás en las localidades gazatíes de Rimal y Jan Yunis. Un almacén de armas y un centro operativo de Hamás ubicados dentro de mezquitas fueron atacados, así como un punto de entrada a un túnel utilizado por los milicianos para invadir Israel.

En concreto, el Ejército de Israel asegura que ha atacado más de 1.700 objetivos de la organización islamista y de la Yihad Islámica Palestina en las últimas horas.

El portavoz principal del Ejército israelí, Daniel Hagari, ha afirmado que los milicianos de Hamás «no tienen dónde esconderse en Gaza», ya que la fuerza aérea israelí está llevando a cabo una intensa actividad de ataques aéreos sin precedentes en el enclave palestino en oleadas cada cuatro horas. «Les alcanzaremos (a Hamás) en todas partes», ha advertido.

Según otro portavoz del Ejército israelí, la guerra ha entrado en «horas significativas» y ha confirmado que continúan los «bombardeos masivos» contra la Franja de Gaza, donde están siendo lanzados «cientos de toneladas de bombas contra miles de objetivos».

«El Ejército ha atacado esta noche muchos objetivos en el barrio de Hafar Rimal, símbolo de la Franja de Gaza. Tras ello, otra oleada de ataques ha alcanzado cientos de objetivos en Jan Yunis, incluida infraestructura de Inteligencia, apartamentos operativos, casas de operativos de organizaciones terroristas en la Franja y puntos de reunión para terroristas», ha detallado.

Asimismo, ha especificado que los bombardeos de la Fuerza Aérea se han visto acompañado de ataques de la Armada «en el espacio marítimo». «Cualquiera que intente salir en embarcaciones o ir a la costa es eliminado», ha dicho, según un comunicado publicado en la página web del Ejército de Israel.

Al respecto, los civiles en Gaza, asediados por los incesantes bombardeos, denuncian que los ataques de Israel se realizan en zonas residenciales, de culto y hospitales, sin aviso previo que permita la evacuación.

«Esto no es un evento regular, esto es una guerra, esto es un evento masivo y épico en la sociedad israelí», ha subrayado Hecht, al asegurar que las tropas hacen lo posible para minimizar los daños a civiles.

La guerra entre Israel y Hamás ha dejado más de 3.000 muertos y más de 6.000 heridos, según cifras de la ONU.