El Ejército de Israel intensificó este miércoles los ataques sobre la Franja de Gaza, donde ha matado a más de 1.000 personas y herido a más de 5.000, según las autoridades de Gaza.

En el quinto día de la guerra, Israel aseguró haber atacado más de 250 objetivos y haber dado de baja a dos altos cargos de Hamás.

Los bombardeos israelíes han causado graves daños en la infraestructura de la Franja de Gaza, que se ha quedado sin luz desde esta mañana.

La compañía eléctrica de la zona asediada por el ejército israelí había informado esta mañana de que cortaría el suministro eléctrico a las 2:00 P.M. (hora local), 1:00 P.M. (hora de España peninsular), después de que Israel desconectara de su red la Franja el pasado sábado.

A la planta eléctrica de Gaza sólo le quedaban esta mañana 40 megavatios disponibles, cuando la demanda media de las últimas 12 horas había sido de 560 megavatios.

En el plano diplomático, el papa Francisco pidió la liberación de los rehenes israelíes y expresó su preocupación por el asedio que viven los palestinos en Gaza.

También el grupo chií libanés Hizbolá se ha visto envuelto en el conflicto, asegurando haber causado «un gran número de bajas» israelíes en un ataque con misiles de precisión.

El Ejército de Israel ha confirmado que ha sido atacado con un misil antitanque y ha iniciado una réplica contra Líbano.

La guerra entre Israel y Hamás, que comenzó el sábado, es la más grave desde la ofensiva de 2014, que causó la muerte de más de 2.000 personas.