La Comisión Europea ha decidido llevar a España ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) por dos motivos: la gestión inadecuada de los residuos y la falta de revisión y actualización de sus planes hidrológicos.

Vertederos ilegales:

• La Comisión denuncia que España no ha tomado las medidas necesarias para garantizar una gestión de residuos que no ponga en riesgo la salud humana ni el medio ambiente.

• Se han detectado 195 vertederos ilegales que no han sido sellados o renovados desde 2008, incumpliendo la legislación europea.

• La Comisión ya había advertido a España en 2015 y 2018 sobre la necesidad de solucionar estas deficiencias, pero las medidas tomadas han sido consideradas insuficientes.

Planes hidrológicos deficientes:

• España, junto a Bulgaria, Irlanda, Portugal, Malta y Eslovaquia, no ha cumplido con las directivas europeas que exigen la revisión y actualización de los planes de gestión de las cuencas hidrográficas y de prevención de inundaciones.

Estos planes son esenciales para garantizar la sostenibilidad del agua, tanto para las necesidades humanas como para la fauna y flora.

La Comisión critica que España, Malta y Portugal no hayan presentado la información completa sobre sus planes hidrológicos y de gestión de inundaciones.

Consecuencias:

• La denuncia ante el TJUE podría conllevar multas para España.

• Es crucial que España tome medidas urgentes para solucionar las deficiencias en la gestión de residuos y actualizar sus planes hidrológicos.

España acumula el mayor número de infracciones medioambientales abiertas por la Comisión Europea.

La gestión de residuos y la protección del agua son dos de los principales desafíos ambientales que enfrenta España.