El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha prometido este martes «no parar de luchar hasta la victoria total», tras la muerte el lunes de 21 militares israelíes tras un ataque con granada propulsada con cohete contra un carro de combate que protegía a un grupo de soldados que estaban colocando explosivos en dos edificios para su demolición y el posterior derrumbe de estas estructuras.

«En nombre de nuestros héroes, por nuestras vidas, no dejaremos de luchar hasta la victoria total», ha manifestado Netanyahu en un mensaje en su cuenta en la red social X, en el que ha reconocido que el de ayer fue «uno de los días más difíciles desde el inicio de la guerra».

Netanyahu ha lamentado la muerte de los «heroicos soldados» y ha trasladado sus condolencias a las familias de los fallecidos. «Sé que, para estas familias, sus vidas cambiarán para siempre», ha dicho el primer ministro israelí.

«Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) -nombre oficial del Ejército israelí- ha abierto una investigación en torno a este desastre. Debemos aprender las lecciones y hacer todo lo posible para proteger la vida de nuestros soldados», ha zanjado.