El presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó hoy jueves que no privatizará el estatal Banco do Brasil, mayor entidad financiera de América Latina, ni dividirá la petrolera nacional Petrobras.
En un evento con parlamentarios de partidos aliados en Brasilia, Lula reiteró su compromiso de campaña de que no privatizará las principales empresas estatales, tal y como pretendía hacer su rival en los comicios, el actual presidente Jair Bolsonaro.
«Quiero decirles que las empresas públicas brasileñas serán respetadas. Petrobras no será seccionada. Quiero decir que el Banco de Brasil no será privatizado ni tampoco la Caja Económica», dijo.
Añadió que el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) o el Banco del Noreste volverán a ser bancos de inversión, «incluso para pequeños y medios emprendedores».
En su discurso, Lula cuestionó que Brasil tenga meta para la inflación pero no para el crecimiento económico, y reiteró que el país necesita gastar más en salud y educación, algo que, a su juicio, lo hará crecer.
El presidente electo también afirmó que el presidente de la república debe tener credibilidad y comportarse de tal manera que cuando diga algo, la sociedad entienda que es algo serio, en clara alusión a Bolsonaro.
«Solamente el Estado puede tomar las decisiones que pueden garantizar la estabilidad política, la estabilidad económica, la estabilidad jurídica y la estabilidad social», concluyó Lula.
